Preguntas Frecuentes
¿Qué es PrajnaDose?
Prajna, del sánscrito “Prajñā”, es la sabiduría que tiene el potencial de llevarnos a la iluminación.
PrajnaDose es un tratamiento de Microdosis a base de hongos psilocybe que nos permite mayor presencia mental y agudeza cognitiva en el día a día, con el fin de sanar nuestra mente.
Debe entenderse como medicina integrativa, pues su fin es restaurar el equilibrio de la mente para sanar los trastornos de raíz.
¿Qué es microdosis?
Una dosis sub perceptual de una sustancia enteógena con el potencial de aumentar nuestra atención y creatividad, manteniendo a nuestra mente presente.
¿Para quién es PrajnaDose?
Para cualquier persona que busca hacer trabajo personal. No existe un caso específico para su uso.
Se ha utilizado para trabajar diversos trastornos mentales (depresión, adicción, estrés postraumático, insomnio, etc.), pero también para alcanzar una mayor presencia y enfoque, o para formar nuevos hábitos benéficos (nuevas rutinas de ejercicio, mejorar la alimentación, etc.).
¿Para quién NO es PrajnaDose?
La microdosis promueve la entropía mental, generando nuevas posibilidades de asimilar la realidad en nuestra mente.
Quienes sufren de psicosis, ataques de pánico o esquizofrenia tienen ya demasiada entropía en su mente y es contraproducente agregar aún más. No debería consumirse por alguien que tenga un trastorno mental diagnosticado.
No es recomendable para mujeres embarazadas por una carencia de estudios que demuestren lo contrario.
¿Qué hacen las sustancias enteógenas en mi cerebro?
Actúan desactivando la región neuronal de mayor importancia al estructurar nuestra conciencia habitual; la región que dicta qué estímulos externos asociamos a los constructos mentales que ya conocemos.
Disminuir la actividad de esta región permite reestructurar patrones mentales adquiridos porque se observan nuevas perspectivas y formas de entender la realidad.
¿Cada cuánto debo tomarlo y durante cuánto tiempo?
Se consume 2 veces por semana, dejando mínimo 2 días de distancia entre cada cápsula. Sugerimos establecer dos días fijos en la semana para mayor facilidad (p. ej. Lunes y Jueves).
El tratamiento no tiene una duración máxima definida, sugerimos que se practique durante al menos dos meses y hasta que se alcance el resultado deseado.
¿Cuál es el resultado de PrajnaDose?
Los resultados son específicos para cada caso; sin embargo, al finalizar se suele observar en general un mejor humor, mejores hábitos de sueño y alimentación, mayor creatividad y mayor contacto con emociones.
¿Cómo me preparo para iniciar PrajnaDose?
Identifica qué te gustaría mejorar de ti: patrones o adicciones que quisieras trabajar, hábitos que quisieras formar o ideas que quisieras cambiar. Después, selecciona la intención que creas más conveniente para esto.
Prajna Dose es un tratamiento integral y, como tal, requiere de un trabajo propio para obtener los resultados deseados.
Imagínalo como terapia, si tienes más claro lo que quieres trabajar antes de iniciar con ella, te será más fácil lograrlo.
Microdosis para la claridad mental
Nuestra conciencia habitual es un conjunto de constructos mentales que hemos formado desde niños. Desde cómo percibimos nuestras emociones básicas hasta cómo nos percibimos a nosotros mismos (ego).
Todo constructo mental que mantenemos surgió como una estimación de la mente tomando la información externa disponible en su momento, y que nos ha resultado funcional.
Así, nuestra realidad es ese conjunto de constructos que hemos creado, reforzado y optimizado a lo largo de nuestra vida, para facilitar nuestra supervivencia en el día a día.
Pero esta conciencia alcanzada es sólo un estado de realidad más dentro de una infinidad de posibilidades, y también pagamos un precio alto por la individualidad de esa estructura. Aunque esta capacidad humana nos permite la reflexión, a medida que reforzamos nuestros constructos nos permitimos procesar una menor cantidad de estímulos externos y establecemos así mayores límites a nuestra cognición*.
Perdemos flexibilidad en la mente porque asociamos toda la información externa que recibimos a algún constructo que ya conocemos. Esta rigidez nos dificulta adaptarnos a situaciones nuevas: replantear constructos y reconfigurar patrones de pensamiento existentes.
Nuestra mente suele derribar lo construido únicamente cuando la realidad que presenta se vuelve insostenible. En esos momentos volvemos a procesar la información que recibimos para construir una nueva realidad que nos resulte funcional.
Esos momentos son experiencias que nos marcan profundamente, donde perdemos un sentido profundo de nosotros mismos; como lo son una ruptura de corazón, la muerte de alguien cercano, mudarse a un lugar nuevo o perder nuestro trabajo, etc.
Investigaciones en neurociencia revelan que en esos momentos decrementa la actividad de la región neuronal que tiene la mayor jerarquía manteniendo el orden de nuestra mente.
El resultado es un estado de conciencia similar al de la infancia: Nuestra mente vuelve a permitir un mayor flujo de información en forma de estímulos externos y emociones, con el fin de construir un nuevo sentido.
Estas investigaciones también han comprobado que dicha región puede desactivarse voluntariamente a través de la meditación y/o el uso de medicinas enteógenas.
Esta nueva forma de medicina se está usando en el ámbito psiquiátrico para tratar trastornos mentales como PTSD, alcoholismo, depresión o adicciones y ha obtenido muy buenos resultados.Porque pueden ayudar a reestructurar nuestra realidad formando nuevos caminos y patrones de pensamiento, y derribando aquellos que identificamos como obsoletos.
En estos tiempos, la incertidumbre es algo constante y mantener nuestra mente clara y en el presente es indispensable para poder adaptarnos a la situación cambiante y discernir así de manera congruente con nuestra persona.